La anemia ferropénica y el papel del hierro en la dieta.

Quizá no has escuchado hablar de la anemia ferropénica, pero seguramente ya has escuchado de los efectos y beneficios que incluir hierro en nuestra alimentación tiene para el organismo y estado de salud en general; sin embargo, Popeye no nos ha explicado con claridad cuáles son éstos y cuáles son los riesgos y consecuencias asociados a su deficiencia.  En éste artículo encontrarás toda la información relevante relacionada con la ingestión de éste súper mineral y los roles o papeles que toma en nuestro cuerpo al igual que las fuentes y alimentos de dónde podemos adquirirlo.

Padecer anemia ferropénica puede representar riesgos y complicaciones orgánicas severas;  es importante que sepas identificar si presentas algún signo o síntoma asociado, para que puedas tomar las medidas correspondientes (aquí descritas). 

¿Qué es la anemia ferropénica?

La anemia describe la disminución  de la cantidad de glóbulos rojos y hemoglobina en sangre. Ésta enfermedad se puede clasificar según su origen (por deficiencia de hierro, folato, vitamina B12) y por su morfología (macrocítica, normocítica, microcítica). La anemia ferropénica es la enfermedad ocasionada por un aporte o ingestión  insuficiente de hierro en relación con las necesidades corporales.

No incluir suficientes  fuentes o cantidades de alimentos con contenido significativo de éste mineral puede representar la causa principal de la presencia de ésta alteración de la función orgánica.

Los glóbulos rojos y la hemoglobina…

La hemoglobina (Hb) es la hemoproteína que se encarga de transportar los gases (CO2, O2) desde y hacia los pulmones a través de la sangre hasta  los distintos órganos y tejidos que componen al cuerpo humano. Ésta proteína se encuentra unida con el hierro (de ahí su denominación «hemoproteína») al interior de los glóbulos rojos. Los glóbulos rojos o eritrocitos son producidos en la médula osea por la eritropoyesis (estimulado por la hormona EPC) .

La deficiencia de hemoglobina altera la función y producción de glóbulos rojos.

La anemia ferropénica no es en sí la deficiencia de hierro sérico. Las cantidades que se mantienen insuficientes durante un periodo continuo y prolongado de éste mineral afectan la producción de glóbulos rojos e impiden el correcto transporte de oxígeno a través del sistema circulatorio.

Según la Organización Mundial de la Salud una de cada cuatro personas padece anemia causada por un aporte insuficiente de hierro.

¿Cuáles son los signos y síntomas asociados de la anemia ferropénica? ¿Cómo diagnosticarla?

Las personas diagnosticadas de anemia ferropénica o que creen que padecen ésta enfermedad pueden presentar algunos de los siguientes signos y síntomas asociados. Los síntomas son manifestaciones clínicas que son percibidas por los pacientes (subjetivos), los signos son características clínicas objetivas que pueden observarse por el médico tratante.

Dentro de los signos y síntomas más frecuentes figuran los siguientes:

• Palidez de conjuntivas (en los ojos).
• Cara, plantas de los pies y manos descoloridas.
• Letargo.
• Falta de energía.
• Cansancio constante y frecuente.
• Vértigo o mareo.
• Cefaleas y dolores de cabeza que varían en la intensidad.
• Falta de apetito.
• Mal humor y cambios en los estados de animo.

A pesar de que los signos y síntomas anteriores contribuyen al diagnóstico de la anemia; ante la sospecha del padecimiento,  es pertinente y deberán llevarse a cabo  pruebas de laboratorio que determinen la presencia de la afección. Éstas pruebas deberán ser solicitadas por el médico especialista, nutriólogo o profesional de la salud.

Dentro de las pruebas útiles que se sugieren se encuentran los siguientes indicadores:

Pérfil de Hierro:

• Índice de Ferritina: Representa la forma de depósito de hierro en el hígado, médula y bazo.
• Protoporfirina zinc eritrocitaria (PZZ).
• Capacidad total de fijación de hierro (CTFH).
• Transferrina (Indicador):  Es una proteína transportadora de hierro. Aumenta con la disminución de Fe sérico. (relación inversamente proporcional)
• Índice de saturación de transferrina (IST): Indica la capacidad de unión del hierro a ésta proteína.
• Hemoglobina (Hb): Para que sea útil en el dx. deberá acompañarse con las pruebas anteriores.

Hemograma completo: 

• Volúmen corpuscular medio (VCM): Útil para clasificar la anemia en micro, macro o normocítica. Indica el tamaño promedio de eritros.
• Hemoglobina corpuscular media (HCM): Cantidad promedio de Hb en los eritrocitos o glóbulos rojos.
• Concentración promedio de hemoglobina corpuscular (CMHC).

¿Cómo se puede tratar la anemia ferropénica?

El tratamiento de la anemia ferropénica incluye el suministro o ingestión de hierro. Con base a la gravedad de la afección el especialista sugerirá la toma de complementos y suplementos alimentarios así como la ingestión de una mayor cantidad de productos y alimentos ricos en hierro.

Las dietas variadas y completas representan medidas que previenen la aparición de la enfermedad.

¿Quién está en riesgo de padecer anemia ferropénica?

–Embarazadas:  Las personas en periodo gestacional necesitan aumentar la dosis e ingestión de hierro. Debido a que la producción de sangre aumenta.

Se recomienda que reciban asesoría de un nutriólogo para que se eviten complicaciones en el embarazo.

-Personas que sigan dietas muy restrictivas o que tengan algún trastorno de la alimentación: Las personas con anorexia nerviosa o bulimia pueden presentar anemia ferropénica. Lo anterior es causado por la disminución drástica de la cantidad de alimentos, energía y nutrimentos que ingieren (más común en px. con A.N.)

-Personas en crecimiento O individuos que empiezan con la alimentación complementaria (primer año de vida): En las distintas etapas de crecimiento y desarrollo el requerimiento o cantidad de éste mineral necesario varía. En éstos años de crecimiento es necesario ajustar las porciones de alimentos (por ende la dósis de Fe.), para evitar que el consumo de Fe. sea menor al necesario.

A mayor masa o volumen mayor cantidad de sangre disponible; por ende, mayor necesidad de hemoglobina y glóbulos rojos para llevar a cabo las funciones requeridas.

¿Quién más?

-Personas veganas o vegetarianas: A pesar de que encontramos hierro en productos de distintos orígenes; los individuos que llevan regímenes o dietas dónde suprimen las fuentes de origen animal, muchas veces no cuentan con asesoría adecuada sobre como mejorar la asimilación del hierro no hem.

Por lo anterior su ingestión es insuficiente y presentan deficiencias (si es tu caso, te invito a leer el apartado «¿Cómo aumentar la biodisponibilidad o absorción de hierro no hemo o vegetal?»).

-Poblaciones en estados socio económicos precarios o vulnerables: Las personas con ingresos reducidos suelen tener barreras para adquirir la variedad de productos animales recomendados. Aunado a ésto, su alimentación en general puede ser insuficiente y escasa, por lo qué el riesgo de presentar anemia ferropénica y otras afecciones aumenta.

¿Qué es el Hierro?

El hierro es un elemento químico (así es, lo encontramos en la tabla periódica al igual que muchos otros minerales) que es necesario en el cuerpo humano y en varios organismos vivos. Éste representa el oligoelemento que se encuentra en mayor cantidad en el organismo; está presente en órganos, tejidos conectivos y sangre.

Es un mineral que interviene y participa en procesos vitales como el transporte de oxígeno y dióxido de carbono a través de la sangre por la producción de una proteína conocida como hemoglobina. Además de ésto, interviene en la regulación metabólica y función celular (es un componente de varias enzimas y participa en reacciones como donante o aceptor de electrones).

   

¿En qué alimentos podemos encontrar hierro?

 Éste mineral se encuentra en alimentos de origen animal como también en alimentos de origen vegetal. La diferencia entre éstas dos fuentes es la biodisponibilidad o la cantidad que nuestro organismo es capaz de absorber.

El hierro que se encuentra en productos de origen animal se conoce como hierro hemínico, el hierro disponible en productos vegetales se clasifica como no hemínico; representando éste el de menor biodisponibilidad, lo que indica que su absorción es menor en comparación con el Fe hemínico.

Productos de origen animal con buen contenido de hierro: 

• Cortes de res o ternera.
• Pollo.
• Huevo.
• Pescados.
• Mariscos.
• Viseras (hígado principalmente).

Productos de origen vegetal con buen contenido de hierro: 

• Oleaginosas y semillas: nueces, semillas de girasol, pistaches, almendras.
• Leguminosas como frijol, lenteja, habas, garbanzos etc.
• Vegetales de hoja verde como espinacas, berzas o kale, acelgas o col rizada.
• Cereales fortificados.
• Tofu.

¿Cómo aumentar la biodisponibilidad o absorción de hierro no hemo o vegetal?

La diferencia en la estructura química del hierro «hem» y «no hem» la encontramos en el grado de oxidación de la molécula. El hierro de origen animal Fe+2 (ferroso) se encuentra oxidado, el hierro de origen vegetal Fe+3 (férrico) no. El hierro ferroso posee mayor capacidad de unión  y afinidad por macro moléculas. La biodisponibilidad y absorción de éste es mayor en relación con el anterior; por lo que su «capacidad funcional» en el cuerpo, también es superior.

Como revisamos con anterioridad; podemos encontrar hierro en alimentos de origen animal y en alimentos vegetales. El hierro en éstos posee un estado de oxidación distinto, por lo qué el papel que desempeñan en el organismo es igual diferente.

Lo que deberías saber…

Lo que muchos no saben es que es posible aumentar la biodisponibilidad del hierro férrico con la adición de una fuente ácida que cause la oxidación de la molécula. De ésta forma, el hierro no hemo pasa a hemo y así mejora su asimilación en el organismo.

La lógica es sencilla y para muchos parecerá falso. No obstante, añadir gotas de limón o algún cítrico en nuestros vegetales, semillas, o leguminosas promoverá ésta modificación química que permita que el hierro no hemo pase a hemo (de Fe+3 a Fe+2). Así pueda llevarse a cabo de forma efectiva el transporte de gases por la hemoglobina.

Tips para mejorar la «calidad» del hierro en los productos vegetales: 

Algunos de los consejos que te proponemos en el caso de que tu dieta escaseen los productos de origen animal son los siguientes:

• Añade unas gotas de limón en tus ensaladas y verduras crudas o cocidas.
• Prepara bebidas con cítricos y tómalas en el mismo tiempo y de forma conjunta con tus platillos.
• Añade unas gotas de limón a tus infusiones o agua simple.

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