El buen manejo de la glucemia es un punto importante en el tratamiento de la diabetes mellitus. Así que en esta ocasión hablaré del índice Glucémico, averiguemos qué es y con qué más se relaciona.
Contenidos
Diabetes y los Hidratos de Carbono
La Diabetes Mellitus es el contexto donde vamos a desarrollar el tema de índice glucémico. La razón de esto es la estrecha relación que tienen los alimentos con el comportamiento de la glucemia en sangre. Los distintos nutrientes también tienen su relación con este padecimiento, específicamente en el comportamiento de la insulina y su relación con su metabolismo. Sin embargo, los hidratos de carbono han despertado mucho interés para quienes se dedican a la atención en Diabetes.
Durante muchos años, que finalizaban con mis primeros años de facultad, se cuestionaba el objeto de las “dietas bajas de carbohidratos”. Así mismo, mis catedráticos nos hablaban sobre realmente qué era una “dieta para diabético” (que además está mal dicho). No es correcto referirnos de esa manera a una persona con tal padecimiento, sino “persona que cursa con diabetes”. Ya estamos avanzados como para continuar estigmas.
Pero volviendo al tema, un plan de alimentación para una persona con diabetes se centra en:
- Control de peso (reducir de ser necesario o mantenimiento).
- Mantener una HbA1c por debajo del 7% (el cumplimiento de la asesoría nutricional aporta una ayuda de la reducción del 1-2% según la ADA).
- Mantener cifras óptimas de glucosa, colesterol y triacilgliceroles.
- Prevenir hipoglucemias e hiperglucemias.
- Lograr y mantener bienestar general.
Para concluir la idea, la dieta del paciente que vive con diabetes debe ser adaptada a su contexto, a final de cuentas, el mayor impacto viene de la cantidad y calidad de alimentos que de la sola idea del índice glucémico, y ahora veremos por qué.
Hidratos de Carbono
El índice glucémico va relacionado con el consumo de Hidratos de Carbono en nuestra dieta. Hay distintos términos para referirnos a estos, como azúcar, fécula y fibra. Los valores de glucemia en sangre después de comer se determinan por la aparición de glucosa. Específicamente, la aparición de glucosa en sangre a partir de la digestión y su absorción, además de la capacidad de la insulina para eliminar la misma glucosa de nuestra circulación.
Esto nos lleva a un punto “lógico”. Las dietas con bajo aporte de hidratos de carbono reducen la glucosa en sangre ¿No es así? Bueno, la cuestión va más allá de un bajo consumo de hidratos de carbono. Las fuentes que tienen buen aporte de éstos también aportan vitaminas, minerales, fibra dietética y energía. La lista de estas fuentes incluye frutas, verduras, legumbres, lácteos y semillas. Nos estaríamos perdiendo de mucho. Además, vaya a saber que no hay consenso para determinar qué es “baja en carbohidratos”. Para rematar, no hay un rango en porcentajes para determinarlo. A lo mucho la ADA recomienda un déficit calórico para la pérdida de peso. El ajuste que se recomienda es: adecuado y personalizado al contexto del paciente.
Carga e Índice Glucémico
Índice Glucémico
Para hablar de índice glucémico es imperativo también mencionar la carga glucémica. Comencemos definiendo el índice glucémico.
El índice glucémico nos indica cuánto incrementa los niveles de azúcar (glucemia) en sangre después de comer un alimento en comparación con el incremento de consumir glucosa. Tanto la glucosa como el alimento deben tener el mismo contenido energético para que sea válido.
Existen ciertas características que hacen que un alimento tenga mayor índice glucémico que otro. Como ejemplo: los que tienen hidratos de carbono con partículas pequeñas, que contienen más amilasa que amilopectina, que se absorben lentamente, que han sufrido procesamiento que facilita la gelatinización, y que no contienen buena cantidad de fibra, lípidos o proteínas.
Actualmente, el índice glucémico por sí mismo no es un indicador que manejemos de forma exclusiva para el diseño de planes de alimentación, ya que no refleja el contenido total de hidratos de carbono. Esto es lo que nos lleva al término de “carga glucémica”.
Carga Glucémica
La carga glucémica nos informa qué cantidad de hidratos de carbono proporciona cierto alimento. Ésta se calcula multiplicando el índice glucémico de un alimento por la cantidad de hidratos de carbono asimilables contenidos en una porción de ese mismo alimento.
Lo que esto significa es que el índice glucémico se mantiene estable, mientras que la carga glucémica depende del tamaño de la porción. Es en esto en lo que debemos tener especial cuidado.
De acuerdo con la Asociación Americana de Diabetes y la Norma Oficial Mexicana para la Prevención, Tratamiento y Control de la Diabetes, la cantidad de energía consumida es más importante que el tipo. Aun así, es importante no dejar de lado la preferencia de alimentos con mayor densidad nutricional.
En otras palabras, la ADA concluyó que, en general, existe poca diferencia entre las dietas con bajo IG y alto IG u otras dietas en términos de control glucémico y riesgo cardiovascular.
Al mismo tiempo que digo que no hay que temerle al índice glucémico, es importante mencionar que aun así, es preferible evitar alimentos hiper palatables, debido a los efectos negativos que tiene el exceso y la facilidad con el que este llega.
Índice glucémico y alimentos
Durante mucho tiempo se tuvo la creencia de que la sacarosa debía limitarse al mínimo basándose en la suposición de que los azúcares se digieren y absorben más rápido que el almidón. Lo que determina principalmente la respuesta y los valores elevados de glucosa después de consumir alimentos es la cantidad total de hidratos de carbono. En este caso, hablamos del efecto del exceso sobre el tipo de hidratos de carbono, o calorías en general.
El efecto de los alimentos ricos en hidratos de carbono sobre la glucemia no puede ser predicha únicamente su tipo (almidón o azúcar), debido a que el aparato digestivo reduce los polímeros de almidón hasta glucosa. El almidón se metaboliza rápidamente hasta en un 100% a glucosa durante la digestión, mientras que la sacarosa se metaboliza en un 50% a glucosa y 50% a fructosa, aproximadamente. La fructosa tiene una respuesta glucémica menor. Sin embargo, esto no significa que los alimentos ricos en estos nutrientes sean inofensivos. Debe educarse a la población a evitar las bebidas azucaradas, bollería, confitería y todos los alimentos densos caloricamente. El objetivo de hacer esto es evitar el empeoramiento del perfil de riesgo cardiometabólico, el aumento de peso y las comorbilidades que todo esto representan.
Recordemos, cada persona tiene sus necesidades y su propio contexto, no le temas al índice glucémico ni tampoco vayas sobrado ante los efectos negativos de los alimentos con alta densidad calórica.
Si quieres saber más mantente leyendo Salud Diez y sígueme en todas mis redes al final del artículo.
Te ayudamos a cuidarte:
🤸♀️Mejora tu forma física, salud y autoestima aquí.
😁Vive sin ansiedad aquí.
🍉Alimentación para aumentar tu masa muscular aquí.
💪Entrenamiento para aumentar tu masa muscular aquí.
😴Evita el insomnio aquí.
✅Puedes encontrar las mejores ofertas de Amazon haciendo click aquí.