Muñeca abierta: ¿Qué es? Síntomas y cómo tratar esta lesión

¿A qué nos referimos cuando hablamos de muñeca abierta?

Cuando hablamos de muñeca abierta, también conocida como esguince de mano, nos estamos refiriendo a una patología que sufrimos en la mano provocada por una rotura, ya sea total o parcial, de un ligamento de los huesos del carpo. Esto hace que nos provoque cierto dolor e inflamación de la zona afectada. Por lo general, no debería de revestir demasiada gravedad pero sí que tendremos que tenerlo en cuenta y buscar una solución rápidamente si no queremos que la cosa vaya a mayores y se vuelva un problema crónico. Son muchos los contextos que pueden provocar que suframos esta lesión, uno de ellos por ejemplo es cuando practicamos algún tipo de deporte o ejercicio concreto en el que empleemos de forma habitual y repetitiva nuestras muñecas. Un claro ejemplo de esto podría ser el Yoga, mas adelante relacionaremos esta lesión con esta práctica.

Ahora pasaremos a tratar el tema mas de fondo y hablaremos por un lado de las distintas causas y síntomas que nos puede producir esta lesión de muñeca abierta. Posteriormente trataré sobre los distintos grados que podemos sufrirla y acabaré hablando sobre el tratamiento que deberíamos seguir para conseguir subsanar la lesión lo mas rápido posible. ¡Vamos allá!

Causas de la muñeca abierta.

Esta lesión se produce cuando los músculos que están en la parte anterior del antebrazo exceden su tensión, lo que hace que tiren hacia abajo los huesos de la muñeca y esto hace a su vez provoquen que tanto la muñeca como la mano desciendan. Este descenso que se produce de forma no natural es el que produce tanto la rotura, en el caso más grave, como la salida de la envoltura de la muñeca. Y esto provoca que se forme una bolsa con líquido sinovial de la articulación.

Una vez ya explicado el cómo se produce esta lesión ahora hablaremos sobre los distintos aspectos que pueden provocarnos la lesión. Estos son fundamentalmente cinco:

• Alternaciones viscerales: La primera causa que puede producirnos esta lesión es que haya un mal funcionamiento de distintos órganos concretos que hace que la zona cervical se vea afectada.
• Alteraciones zona cervical: Esto se produce cuando el nervio que transporta la información a los músculos de la parte posterior de la muñeca se pinza. Esto hace que los músculos pierdan fuerza y se debiliten. Y cuando los músculos están debilitados son fácilmente vencidos por la tensión de los músculos de la parte anterior.
• Actividades deportivas: La práctica de cualquier deporte, por la continua repetición de un mismo movimiento, puede producir lesiones y la muñeca no iba a estar exento de ello. Todo ejercicio en el que se necesite de la flexión de nuestras muñecas son ejercicios más propensos a que podamos sufrir una lesión de muñeca. En el ámbito del yoga por ejemplo, por su cantidad de ejercicios que se necesitan de las muñecas, se es propenso a sufrir algún tipo de lesión de muñeca como ya veremos con mayor profundidad mas adelante.

Y además…

• Repetición de movimientos similares: Aunque anteriormente hemos concretado en los deportes, en aspectos cotidianos del día a día también solemos hacer muchos movimientos repetitivos, pero ¿Qué sucede cuando realizamos acciones repetitivas? Básicamente que el tono de los músculos de la parte anterior de la muñeca aumenten y esto haga que se produzca cierta inestabilidad en la muñeca.

• Causas genética o congénitas: En ocasiones este problema en la muñeca no es producido por ninguna situación en concreta de la vida, si no que nos viene desde que nacemos. Es producto de nuestros genes y simplemente con el hecho de ir creciendo y, por consiguiente, que nuestra muñeca vaya evolucionando a lo largo de nuestra vida se nos presenta el problema.

 

Síntomas provocados por la muñeca abierta.

En cuanto a los síntomas son principalmente tres, éstos son 1º Dolor; 2º Pérdida de fuerza y 3º Inestabilidad en la articulación. Estos síntomas, por lo general, no reviste demasiada gravedad en sí pero debemos de prestar atención a ellos y buscar una solución pronta si no queremos que vaya a peor, ya que la muñeca es una parte del cuerpo que usamos prácticamente para hacer cualquier cosa por lo que es fácil de que pueda empeorar. Dicho esto pasemos ahora a tratar cada uno de los síntomas de forma más concreta:

1. Dolor: Esta lesión, por lo general, no se concentra en un único punto de la muñeca, si no que nos molesta en su totalidad.
2. Pérdida de fuerza: En consecuencia de este dolor hace que la musculatura de nuestra muñeca se pueda debilitar considerablemente.  Y esto conlleve a que perdamos fuerza en ella.
3. Inestabilidad en la articulación: Esta lesión, además suele provocar inestabilidad en la muñeca, lo que se conoce coloquialmente como que «se va a salir de su sitio».
4. Mano inflamada: Como último síntoma que podemos tener por culpa de esta lesión es que nuestra mano quede inflamada y esto haga que tengamos una sensación de calor y entumecimiento no sólo de la muñeca, si no de la mano en general.

Distintos grados de lesión de muñeca abierta.

Son tres principalmente (primer grado, segundo grado y tercer grado) y cuanto mayor sea el grado más severa será la lesión de muñeca que suframos. Pasemos a hablar de forma más concreta de cada una de ellas:

• Primer grado: Este primer grado es el que reviste menos importancia y por tanto el más leve de los tres. Hablaremos de que sufrimos lesión de grado uno cuando tenemos una distensión de los ligamentos sin más, sin existencia de ruptura alguna.
• Segundo grado: En cambio, en este segundo grado intermedio sí aparece ya una pequeña ruptura parcial de las fibras de los ligamentos.
• Tercer grado: En este último grado ya sí estaremos hablando de una lesión que reviste cierta gravedad y que no debemos dejar pasar si no queremos que vaya a más y el problema pueda volverse crónico. En este grado estaremos hablando de una ruptura total de las fibras. Ahora, en esta ocasión sí se requerirá de intervención quirúrgica.

 

¿En qué situación, por ejemplo, podemos sufrir este tipo de lesión?

Como hemos dicho antes, uno de los contextos donde es mas propenso que aparezcan estos dolores es mediante la realización, de forma incorrecta, de distintos ejercicios físicos. Un ejemplo de ello es el Yoga, donde se exige que gran parte del peso de nuestro cuerpo quede apoyado sobre nuestras muñecas. A continuación daré algunas pautas a tener en cuenta para procurar evitar que esto suceda:

• Realiza un calentamiento adecuado: En este caso del yoga el más adecuado sería el de las articulaciones. Para ello debemos de realizar círculos con las muñecas hacia ambos lados. Además flexionar y extender la articulación previamente al ejercicio te ayudará a disminuir las opciones de lesionarte de la muñeca.
• Preocúpate de fortalecer las muñecas: Con esto conseguiremos una mayor protección de la articulación. Existen ejercicios muy simples que ayudan en esta tarea como puede ser el de agarrar una toalla pequeña por ambos extremos y hacer como si estuviéramos escurriéndola. O algún mas simple aún como conseguir pelotas antiestrés y apretarlas con diferentes fuerzas.
• Combina distintas posturas: Ve alternando ejercicios en los que se hace un mayor uso de la muñeca con otros en los que las muñecas no sufran tanto. Mayor relevancia tiene esto si haces Yoga de forma libre, sin nadie que te guíe. Es fácil que, por no tener el suficiente conocimiento, puedas sobreexplotar la muñeca con ejercicios similares. Añadir, aunque sea de vez en cuando, posturas de descanso en tu rutina diaria te permitirá, en muchos casos, poder acabar todos los ejercicios de forma satisfactoria.

Además…

• Presta atención a donde colocas el peso del cuerpo: Existen ejercicios que no realizamos correctamente y ello nos hace forzar en demasía una zona del cuerpo, en este caso la muñeca, cuando realmente el ejercicio no pide tal requisito. Por tanto procura conocer bien el ejercicio antes de realizarlo. Un ejemplo de ello es a la hora de realizar la plancha frontal. En ocasiones tendemos a cargar demasiado peso sobre nuestros brazos cuando lo recomendado es hacerlo sobre nuestra zona media. Hacerlo de forma incorrecta provocaría una carga innecesaria y por consiguiente más opciones de poder sufrir una posible lesión.
• No existe una forma de hacer las cosas, adáptalos a tus necesidades: Cada uno tenemos nuestros límites, no intentes ir más allá de lo que puedas realizar. Prácticamente cualquier ejercicio tiene una forma más suave de realizarlo y de, por tanto, sufran mucho menos nuestras articulaciones.

 

¿Cómo podemos tratar la lesión de la muñeca abierta?

Lo primero que debemos hacer cuando sufrimos una lesión de este tipo es acudir al especialista para que trate nuestra lesión y nos de un tratamiento a seguir. Si deseas pedir cita con uno para que trate tu caso puedes acudir al siguiente enlace: Fisioterapeuta.

A lo largo de la historia a la hora de tratar una lesión aguda, como puede ser la muñeca abierta, los especialistas han acudido a tres protocolos distintos, pero muy parecidos entre sí, llamados RICE; PRICE y por último POLICE, todos ellos formados por siglas de palabras inglesas:

1) El primero de todos fue RICE:

• R de Rest (Descanso)
• I de Ice (Hielo)
• C de Compression (Compresión)
• E de Elevation (elevación).

2) Más adelante se añadió una nueva sigla a la palabra y se añadió una P al inicio. Formando, así, la palabra PRICE y la cual hace referencia a Protection (Protección).

3) Y el protocolo que se usa actualmente, el cual es el que vamos a tratar a continuación, es el formado por la palabra POLICE. Sus siglas son las siguientes:

• P de Protection (Protección)

Es el primer paso que debemos dar cuando sufrimos una lesión como esta. Consiste en proteger inmediatamente la zona afectada con el fin de limitar los movimientos. ¿Cómo hacemos esta tarea? Fácil, mediante vendajes funcionales en este caso

• O de Optimal (Optima) + L de Load (Carga), formando así carga óptima.

Lo importante de verdad aparece en este punto y tiene sentido puesto que es el punto que diferencia a los otros dos protocolos. Aunque se suele creer que lo que mejor podemos hacer ante esta situación es tener reposo absoluto de la zona, no es del todo correcto. Este punto aboga que para curar la lesión lo que se debe de hacer es realizar cargas óptimas. Dicho con otras palabras, debemos de tener un reposo relativo y una rehabilitación funcional. Y ahora viene la pregunta del millón… ¿Cuál es esa carga óptima? No hay nada mejor para saberlo que acudiendo a un fisioterapeuta. Éste, mediante un estudio en el cual analizará todos los aspectos y determinará cual es la carga optima que debes seguir para recuperarte completamente.

• I de Ice (Hielo)

El uso de hielo en las primeras 72 horas tras la lesión puede ser muy importante para reducir o calmar el dolor, evitar la posible inflamación de la zona, posibles espamos, etc… Pero ¿Cómo debemos de aplicarlo? De forma discontinua y protegiendo la zona lesionada de tal manera que evitemos posibles quemaduras en la piel. Para ello podemos usar una bolsa de hielo o una toalla para reducir la sensación de frío y como digo evitar posibles quemaduras.

• C de Compression (Compresión) y E De Elevation (Elevación)

Como hemos dicho anteriormente la compresión de la zona mediante un vendaje funcional es muy importante. Puesto que esto unido a la elevación de la zona afectada hará que mejoremos el retorno venoso y además reducir el edema que puede llegar a producirse.

Después de esto y dependiendo de como nuestro especialista vea nuestra lesión existen otros tipos de tratamientos fisioterapéuticos que nos pueden venir bien. Algunos de ellos son:

• Drenaje: Realización de maniobras precisas y suaves sobre la zona lesionada con el fin de activar el sistema linfático. Con ello estaremos ayudando a la reabsorción del líquido intersticial y a la conducción de éste a través de sus vasos para su depuración y deshecho.
•  Electroterapia: Emplear la electricidad para curar. ¿Cómo es esto? Esto se consigue utilizando los electrones y la diferencia de potencial que hay entre dos puntos para que fluyan y generen energía.
• Y otros como pueden ser la realización de estiramientos; el fortalecimiento de la zona afectada, etc…

 

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Hasta la semana que viene. ¡Sed felices!