Alimentos probióticos: ¡descubre qué son y dónde encontrarlos!

¿Quieres saber más sobre cómo cuidar la flora intestinal y beneficiarte de las propiedades de los alimentos probióticos? Sigue leyendo y descubre todo lo que necesitas saber sobre la microflora y cómo cuidar tu salud desde dentro mediante tu alimentación.

Introducción: Microbiota y probióticos

¿Sabías que nuestro tracto digestivo alberga alrededor de 100 billones de bacterias? Nuestra microbiota puede alcanzar hasta un total de 600 gramos de nuestro peso total, y desempeña funciones imprescindibles para el correcto funcionamiento de nuestro organismo.

¿600 gramos de mi peso son bacterias? ¡Que no cunda el pánico! Al contrario de lo que se suele decir, no todas las bacterias son negativas para nuestra salud. Esta microflora que se aloja en nuestro colon se encarga de tareas como las siguientes:

• Facilitar la digestión de determinados alimentos.
• Apoyar al sistema inmunitario en la defensa frente a patógenos externos y actuando como efecto barrera.
• Ser un aporte estructural y sustrato para la mucosa intestinal.
• Facilitar el metabolismo y síntesis de algunas vitaminas (K y B), y otros micronutrientes.

¿Qué relación guardan los probióticos con la microbiota?

Existen ciertas ocasiones en las que la microbiota intestinal puede verse afectada seriamente, ocasionándonos diversas complicaciones de salud. Ejemplos de ello son la toma continuada de antibióticos, el estrés, patologías intestinales como  pueden ser el colon irritable o la colitis ulcerosa. También una alimentación pobre en nutrientes pueden ser los culpables de su deterioro, por lo que es muy importante prevenir esta situación. Uno de los mejores métodos para cuidar de nuestra flora intestinal es mediante la toma de probióticos.

·Ahora bien… ¿Qué es un probiótico?

Según la Organización Mundial de la Salud, los probióticos son «microorganismos vivos que, administrados en cantidades adecuadas, confieren un beneficio de salud a quien los toma.»

Te mostramos una lista de los microorganismos probióticos más importantes:

• Lactobacillus acidophilus
• Lactobacillus rhamnosus
• L. casei
• L. Reuteri
• Biffidobacterium
• Streptococcus thermophilus

¿Dónde podemos encontrar probióticos?

Existen varias maneras de tomar estos beneficiosos microorganismos. Una de las más cómodas es mediante la toma de suplementos probióticos (en forma de cápsulas o sobres) que podrás encontrar en farmacias y tiendas especializadas. Pero sin duda, la forma más natural y beneficiosa de ingerirlos es mediante el consumo de alimentos probióticos. Este tipo de alimentos cuentan con fermentos naturales.

¿Qué son los alimentos probióticos?

Un alimento probiótico es aquel que de forma natural contiene cepas de estos microorganismos con propiedades beneficiosas para la salud. Generalmente este tipo de productos se obtienen a través de la fermentación.

Lista de alimentos probióticos

1. Kéfir: la principal peculiaridad de este lácteo es que no ha sido fermentado con bacterias, sino que para ello se emplea hongos. El Kéfir contiene una variedad de hasta 30 cepas probióticas y levaduras diferentes, y además, es fuente de vitaminas liposolubles (A,D,E, K), minerales como el calcio y el potasio.  El Kefír tiene una cepa probiótica exclusiva, llamada Lactobacillus Kefir. Esta peculiaridad es Debida al tipo de fermentación que sufre. Por último, es el lácteo de preferencia para intolerantes a la lactosa.
2. Kombucha: esta bebida procedente de China es obtenida a partir del té negro fermentado, y ha sufrido un «boom» de popularidad en los últimos años. En este caso, se emplean levaduras y bacterias para su elaboración, aportando un sabor agridulce y una ligera sensación de cosquilleo en la boca. Contiene 3 variedades de probióticos y otras 3 de levaduras beneficiosas para la salud.
3. Yogur: en la gastronomía española y en la europea, el yogur es uno de los alimentos más populares y versátiles. A pesar de contener menos cantidad de cepas probióticas que el Kéfir, tiene un sabor mucho más suave y por ello se consume con mayor frecuencia. Este lácteo puede aparecer en diversas formas y presentaciones. Para evitar deslices, te recomendamos leer minuciosamente la lista de ingredientes antes de adquirirlo. Un consejo: evita los que contengan azúcar añadido y aromatizantes artificiales, y opta por la variedad natural, o en su defecto, el yogur griego.

Otros alimentos probióticos que quizá aún no conoces:

1. Miso: este ingrediente es típico de la cocina asiática, y se basa principalmente en semillas de soja fermentada con sal marina. Al igual que ocurre con el Kéfir, este alimento se obtiene mediante la fermentación de los ingredientes mencionados anteriormente con hongos (en concreto, el hongo koji) y levaduras. Dependiendo del tiempo de fermentación, podemos diferenciar tres tipos de miso: negro, rojo y blanco. Cualquiera de estas variedades es fuente de micronutrientes, y puede emplearse como condimento en cualquier tipo de recetas. Además, cada vez se tiene más en cuenta el miso para perder peso.
2. Chucrut (col fermentada) y Kimchi. Puede que estos sean los alimentos con propiedades probióticas que menos se conozcan en la cultura occidental, pero estos ingredientes procedentes de la gastronomía coreana proceden de la col fermentada, y cada vez se pueden leer con más facilidad en cualquier carta de un restaurante internacional. Si ya de por si la col es un alimento beneficioso para la salud, al añadir un proceso de fermentación obtenemos una gran cantidad de vitaminas y minerales. Y a esta fermentación hemos de añadir las bondades de las cepas probióticas que aparecerán tras este proceso.

¿Por qué es recomendable consumir alimentos probióticos en lugar de suplementos?

Existen varias razones por las que los expertos recomiendan obtener beneficios de estas bacterias. exclusivamente mediante la alimentación, las cuales te detallamos a continuación:

• Es más económico. Los productos con cepas probióticas añadidas suelen tener un precio muy elevado en comparación con llenar tu nevera de alimentos que los contengan de forma natural.
• Es suficiente. A no ser que padezcas alguna patología digestiva o tu sistema inmune se haya visto comprometido recientemente, la cantidad de probióticos que contienen los alimentos es necesaria para mantener una micloflora sana y estable.
• No sólo de probióticos se vive. El consumo de cualquiera de los alimentos mencionados unas líneas atrás aporta innumerables nutrientes además de estas bacterias: vitaminas, minerales, fibra y otros macronutrientes que aportarán a tu día a día un extra de nutrición.

En resumidas cuentas, la microbiota intestinal juega un papel determinante en nuestra salud. Una de las formas más eficaces de cuidar de estas bacterias intestinales es mediante la toma de alimentos probióticos.