sonAl día de hoy, el término de «polialcoholes» se ha popularizado mucho, sobre todo en las áreas de nutrición y fitness. Personalmente, yo había escuchado sobre los polialcoholes o polioles, pero en realidad no sabía exactamente qué eran y sus efectos en el organismo. Es por esto que me di a la tarea de investigar todo sobre estos azúcares alcohólicos (de ahí su nombre) que actualmente se utilizan bastante en productos sugar free y bajos en calorías. Es importante que como consumidores tomemos en cuenta no solo que el producto sea «light», sino también sus ingredientes. Además, debemos estar conscientes de cómo nuestro organismo reacciona a ellos.
Contenidos
¿Qué son los polialcoholes?
También conocidos como polioles, son sustancias químicas cuya estructura contiene un grupo OH sobre cada carbono. Los más utilizados suelen ser los derivados de la reducción de monosacáridos. Su aplicación principal es como edulcorantes, especialmente en alimentos y bebidas dietéticos o libres de azúcar, ya que los polialcoholes tienen un aporte energético mínimo o incluso nulo. Además, son aptos para consumo de diabéticos y no fomentan la aparición de caries a diferencia del azúcar. Es por esto que se utilizan tanto en la industria, porque son edulcorantes que aportan muy pocas calorías y no contienen azúcar a pesar su poder endulzante.
Como mencioné, son procedentes de la reducción de monosacáridos, algunos de los más comúnes:
- Glucosa: sorbitol
- Manosa: manitol
- Fructosa: sorbitol y manitol
- Galactosa: galactitol
- Arabinosa: arabinol
También pueden proceder no solo de monosacáridos, sino también de oligosacáridos:
- Lactosa: lactitol
- Maltosa: maltitol
- Isomaltosa: isomaltol
¿Dónde se encuentran los polialcoholes?
La mayoría de los polioles provienen de sustancias naturales. El sorbitol, manitol y xilitol, por ejemplo, pueden encontrarse en las plantas. También, estos pueden ser encontrados de manera natural en frutas como las uvas, ciruelas, peras y en algunos vegetales. El maltitol e isomaltitol son sustancias sintéticas que no han sido encontradas en la naturaleza a diferencia de las primeras. En cuando a productos industrializados, los podemos encontrar en una gran variedad. Esto se debe a que, a pesar de no ser azúcar, su perfil de dulzura está muy cerca al del azúcar, por lo que se utilizan para reemplazarlo, tanto en dulzura como en volumen.
El uso de edulcorantes bajos y reducidos en calorías se ha popularizado y ha aumentado considerablemente en los últimos 25 años. Los polialcoholes se combinan con otros edulcorantes bajos en calorías para lograr una dulzura equilibrada y muy parecida a la del azúcar. Los productos donde pueden ser mayormente encontrados son:
- Chicles
- Caramelos
- Productos bajos en azúcar
- Edulcorantes de mesa
- Pastas dentales
- Chocolates
- Pastillas para el aliento
- Enjuague bucal
Polialcoholes en la industria panadera
Además de productos bajos en calorías, los polioles también son utilizados en la industria panadera debido a sus características químicas. Contribuyen a la suavidad y almacenamiento de los productos, regulan la humedad, el sabor y la dulzura. La industria panadera utiliza especialmente sorbitol en soluciones cristalinas, sobre todo en productos de uso dietético, usándolo como sustituto de azúcar. También se emplea para extender la vida útil de los productos horneados, así como para mantener su estabilidad. No solo se emplea como endulzante, sino que tiene propiedades humectantes cuando los productos se almacenan durante largos periodos. Sus principales aplicaciones en la panadería son en esponjas, pasteles, bizcochos, galletas, rellenos de crema y glaseados, con una concentración de hasta 10%.
Pero el sorbitol no es el único utilizado en esta industria. El nivel de reemplazo del azúcar con estos edulcorantes depende del tipo de poliol y el objetivo de la aplicación. Algunos polioles pueden alcanzar un nivel de uso muy alto, como maltitol, lactitol e isomaltitol. Por otro lado, el xilitol y manitol por ejemplo, tienen un nivel de uso mucho más bajo generalmente. Esta diferencia se da también debido a las propiedades sensoriales y fisicoquímicas específicas de los polioles utilizados. En algunos casos, las combinaciones de polioles pueden dar interesantes efectos complementarios, no solo en la panadería, sino en toda la industria alimentaria.
Efectos secundarios
A pesar de que ya comentamos las maravillas que los polialcoholes pueden hacer por nosotros al endulzar nuestros alimentos sin proporcionarnos calorías, no todo es color de rosa. Los polioles precisamente tienen menos calorías debido a que el organismo no los absorbe de manera completa. Son digeridos y absorbidos solo parcialmente en el intestino delgado, y en el intestino grueso son son fermentados por bacterias gastrointestinales. Al ser sustancias no digeribles, su fermentación provoca la formación de compuestos que provocan gases. Estos gases abandonan al cuerpo en forma de flatulencias, lo que puede ser verdaderamente incómodo. Además, el consumo de polioles también puede causar deposiciones frecuentes e incluso diarrea.
Los efectos laxantes de los polioles son característicos de los hidratos de carbono no digeribles, y es por esto que alimentos altos en fibra puedan tener el mismo efecto. Esto depende completamente de la capacidad de absorción gastrointestinal de cada persona, ya que los efectos secundarios no son iguales para todos. También dependerá de la cantidad de polioles que se consuman. El consumo frecuente de alimentos que contengan polioles aumenta la tolerancia a los mismos, reduciendo sus efectos secundarios con el tiempo.
Algunas recomendaciones.
A pesar de que estos edulcorantes traen grandes beneficios y pueden ser de gran utilidad, es importante recodar que todo exceso es malo. No por el hecho de que contengan pocas calorías y no tengan alto índice glicémico como el azúcar no quiere decir que su uso el libre e ilimitado. Aunque existen efectos secundarios sobre su uso, estos no son de una gravedad muy elevaba. Si la calidad de vida se ve afectada por su empleo dentro de la alimentación, lo ideal será reducir su ingesta, para controlar la respuesta del organismo. Si bien son una gran herramienta, lo ideal siempre será consumirlos de manera balanceada, acompañado de una dieta equilibrada y completa. También es importante reconocer que esta es solo una alternativa más, y existen distintas opciones que puedes incluir en tu plan de alimentación al momento de buscar controlar la ingesta calórica.
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