Bruxismo: síntomas y tratamiento

Qué es el Bruxismo

Es una palabra que quiere decir rechinar los dientes.  No es algo voluntario ni que persiga algún fin, sino todo lo contrario. Es un acto involuntario que provoca dolor de cabeza, de músculos, mandíbula, cuello y oído. Esto provocado por la presión que se realiza entre los dientes.  Además de que se desgastaran los dientes al chocar unos con otros.

A quien afecta el bruxismo

El bruxismo puede afectar a las personas de cualquier edad, sin importar si son niños o adultos o si es hombre o mujer.  Aunque hay algunos estudios que indican que suele empezar a los 17 años.  Aunque puede desaparecer en cualquier momento, también existe la posibilidad de que se haga crónico.

Que causa el bruxismo

Puede ser provocado por un estado de ansiedad o incluso alguna alergia.  Como estás patologías suelen vivirse en soledad, la persona u odontólogo que trate al paciente, debe ser muy juicioso para poder brindar un diagnóstico asertivo.

En tiempos pasados se creía que el bruxismo era causado por bichos o parásitos en el  intestino, sin embargo esa hipótesis ya se desechó.

Esto indica que en la actualidad solo está el factor psicológico de estrés que desencadena este mal, y por lo tanto se debe trabajar no solo en la parte dental, sino a nivel mental.

 Tipos de bruxismo

El bruxismo se clasifica de acuerdo a su intensidad y la manera o intensidad con que se mueven los dientes. Se  clasifican en Bruxismo céntrico y bruxismo exéntrico.

Bruxismo Céntrico

Es el que daña el cuello del diente y los más dañados son los premolares por su inclinación.  Al sufrir este tipo de bruxismo, se presentan muchos dolores de cabeza debido al estrés.

Bruxismo Excéntrico

Se le llama también por frotamiento y usualmente daña el borde de los dientes.  Afecta los dientes incisivos porque al frotar los dientes, estos se desgastan.

Una persona puede presentar un solo bruxismo, o ambos y dependiendo de la intensidad del problema, así se verá reflejado en los dientes.

Según el momento en el que se presente este problema, también se ha clasificado en dos tipos que son el bruxismo del sueño y el bruxismo de vigilia.

Bruxismo del Sueño

Se le conocía anteriormente como bruxismo nocturno ya que se presenta durante la noche y la persona no es consciente de que tiene este problema.   Quienes detectan la situación son los dentistas, o la persona que comparta el cuarto con el paciente afectado.

Bruxismo de Vigilia

Antes se denominaba bruxismo diurno ya que ocurre durante el día y usualmente la causa ha sido el estrés.

Según la Afectación

De acuerdo al grado de afectación que presenta la persona, se clasifica el bruxismo, yendo del Grado I al Grado III.

Grado I

Se denomina así cuando está iniciando el proceso, es decir que no ha sido un daño agresivo.  No ha sido crónico sino esporádico y el daño puede ser reversible.  Si la persona nota que tiene el problema y toma medidas para corregirlo, la situación no pasará a más.

Grado II

Si el paciente está muy estresado y usualmente no se da cuenta del problema.  Si el paciente o el profesional lo descubren a tiempo, el problema se puede revertir antes de que sea crónico.

Grado III

Si ya se llegó a este punto, hay un daño mayor y es mucho más difícil de corregir aunque la persona sea consciente del problema. Usualmente el tratamiento debe ser agresivo, con resultados poco favorables y se requiere de mucho esfuerzo y compromiso tanto del paciente como del dentista que lo esté tratando.

Cómo se diagnostica el bruxismo

Se requiere de un examen por parte del dentista, quien determina el grado en el que se encuentra el paciente de acuerdo al daño que observe en sus dientes. Se debe determinar si la  causa es por estrés, que tipo de estrés o que lo desencadena, para poder atacar el problema.

La polisomnografía es el método preciso para diagnosticarla aunque no se realiza tanto cómo se quisiera.

Conforme el problema avanza, el frotamiento en los dientes es cada vez mayor, por lo que el daño crece y la situación se vuelve crónica. Los familiares son un factor determinante para poder realizar un diagnóstico adecuado.  Se le pide a algún familiar que cuando el paciente esté dormido, intente abrirle la boca desde la barbilla.  Si no hay problema, el paciente abrirá la boca muy relajado, de lo contrario será difícil lograr que separe los dientes debido a la tensión.

En conjunto, el paciente junto al dentista deben determinar:  Cuál es el grado de estrés de la persona, por cuanto tiempo sucede el frotamiento de los dientes, la capacidad de la persona de relajarse y sus hábitos generales de salud, enfocándose en la dieta, ejercicio y hábitos al dormir.

Síntomas

Este problema no solo afecta la pieza dental en sí, sino que pude tener otro tipo de síntomas físicos y se den reconocer para informar al dentista tratante. Algunos son la ansiedad, el estrés, la depresión, los dolores de cabeza y oído. También se presenta la sensibilidad tanto muscular como a las temperaturas de comidas y bebidas. Puede presentarse inflamación de la mandíbula y el insomnio.

Tratamiento

Usualmente se utilizan férulas para evitar rechinar o frotar los dientes. Puede ser de plástico o de resina. Esto ayudará a eliminar los dolores de cabeza, mandíbula o incluso de los oídos, hay pacientes que incluso tienen mareos producto de este problema.

Este tratamiento no cura el bruxismo sino que protege mientras ocurre, por lo que debe quedar claro que se debe determinar la causa para poder corregirla.

Existe gran variedad de férulas, tanto en materiales como en costo, y le toca a cada paciente y su dentista, determinar cuál es la mejor opción a utilizar mientras se trabaja en atacar la causa del problema.

Relajarse

Aunque suene fácil, poder relajarse lleva su esfuerzo para cada persona.  Se puede recurrir a diversas técnicas como hipnosis, escuchar música, las mandalas, entre otras. Si la persona consigue relajarse, esto impactará en reducir la ansiedad, estrés o nervios que estén afectando al paciente y que sean los generadores del problema.

Remedios caseros

Aunque ya indicamos que no hay una cura única, sino, que debe ser un tratamiento integral de salud mental y física, hay recomendaciones caseras que te indico a continuación.

• Se recomienda masticar una zanahoria cruda o manzana antes de dormir, para relajar la mandíbula antes de acostarse.
• Colocarse una compresa caliente en ambos lados de la cara para relajar la mandíbula.
• Tomar algún té tranquilizante, ya sea de tilo o valeriana antes de dormir.
• Antes de dormir tomarse un vaso de leche tibia.
• Realizar masajes con aceite de almendra o coco en las mandíbulas.

 Recomendaciones

Asistir regularmente al dentista y de ser necesario al psicólogo o personal de salud mental. Utilizar la férula si se la indica el profesional y buscar la causa del problema.  Controlar el estrés y la ansiedad durante el día para que no nos afecte en la noche.

Es importante no consumir carbohidratos simples o comidas muy voluminosas o pesadas durante la noche.  Consumir la cantidad de calcio requerida por cada uno.

Trabajar la salud mental siendo optimistas, practicando las respiraciones profundas y diversas técnicas de relajación.

Además

Se debe recordar que el daño se presenta también en las encías, y no siempre la persona tiene síntomas del bruxismo.

Recordar que es involuntario, pero se debe tratar a tiempo.  Depende de la edad del paciente, se debe buscar la causa del estrés. Por ejemplo en un adolescente, el bulling es un factor determinante del problema. Y en un adulto sería el estrés laboral.

Se debe tener un cambio en el estilo de vida, comer más saludable, realizar actividades o ejercicio físico, trabajar en la salud mental de cada paciente y ante todo, seguir las recomendaciones de los profesionales en salud para tratar el problema.